miércoles, 26 de septiembre de 2007

Martín Palermo.















Sumergido en una profunda crisis institucional, donde se cambiaba de técnico cada 6 meses, Boca atravesaba una sequía de 5 años sin títulos.

De las grandes figuras de un equipo que había fracasado en la época de Bilardo, Veira heredaba a Maradona y Caniggia entre otros y le pedía a gritos al presidente Macri que contratara dos delanteros. Ambos de la ciudad de La Plata y enfrentados no solo por la rivalidad del Gimnasia y Estudiantes, sino también por partidos en el patio de la escuela. Ellos eran Guillermo Barros Schelotto y un tal Martín Palermo.

El “loco” para los amigos, llegaba luego de conseguir el ascenso en 1995 con Estudiantes de La Plata y tras dos años en gran nivel, era transferido al club de la Rivera.

Desde un primer momento fue titular, alternando sus compañeros de ataque. Un partido Caniggia y otro el mellizo.

Nunca pensó que la llegada a Boca sería su consagración y el inicio de una vida de película.

Bianchi lo confirmó como titular en su arribo al club para el Apertura de 1998 y el “loco” no falló. Metió 20 goles en 19 partidos y se transformó hasta hoy en el máximo goleador de los torneos cortos y en el “optimista del gol” según su propio DT.

La cantidad de goles convertidos lo llevaron a la selección Argentina de Bielsa a disputar la Copa América de 1999. Y allí se produjo el primer gran accidente de su carrera.

Argentina jugaba contra Colombia en busca de la clasificación a la segunda rueda. La selección era superior a los “cafeteros” y se encontró con un penal a favor. Martín agarró la pelota y disparó. Su tiro se fue por lo menos dos metros por encima del travesaño.

Ahí empezó una nueva “anécdota” a esta altura. Minutos mas tarde Argentina, tuvo su segundo penal. Palermo agarró nuevamente la pelota, pero del otro lado estaba Miguel Calero, y el arquero colombiano desvió su tiro.

Mientras los hinchas se agarraban la cabeza y a esa altura la selección ya perdía 2-0, llegó el tercer y ultimo penal. Todos se preguntaron quien patearía. Palermo hizo oídos sordos al pedido de sus compañeros y nuevamente tomó la decisión. Su tiro pegó en el travesaño y se fue afuera. Desde ese día Martín quedó en la historia, pero esta vez no por su actuación, sino por ser el primer jugador que en un mismo partido erró tres penales. Desde ese día y hasta hoy, está en el libro de los Guiness.

Pese a la mala actuación del goleador y de la selección en si (quedo eliminada por Brasil. Cuando no??), volvió a Boca y salió campeón nuevamente.

La lazio lo vino a buscar y ofrecio u$s 20.000.000. El pase era cifra record, pero una noche santafesina le “cortó las piernas” literalmente. El “loco” luego de anotar su gol numero 100, se rompió los ligamentos cruzados y debió ser operado con una posterior recuperación que le demando 6 meses.

Su vuelta fue inimaginable e incomparable. Ni el mas optimista hubiese imaginado, cuando y en que circunstancias sería su vuelta..

Una noche, La Bombonera se llenó como nunca. 65000 personas esperaban el partido de vuelta de los cuartos de final de la copa Libertadores de América. El rival era nada mas y nada menos que el River del “Tolo” Gallego. Boca había perdido la ida en Núñez por 2-1 y enfrentaba la vuelta sin sus dos delanteros principales, Guillermo y Palermo.

El partido estaba 0-0 y el local se quedaba afuera, pero a los 15 minutos del segundo tiempo, Carlos Bianchi lo mandó a la cancha en lugar del “Chango” Moreno.

La bombonera explotó con su ingreso y aquellos que estuvieron en la cancha percibieron un miedo en los jugadores de River. No era para menos. Martín imponía presencia y respeto.

El momento cumbre se dio a los 31 minutos del segundo tiempo. Boca ya se había puesto 1-0 y forzaba los penales, pero Batagglia desbordo por izquierda y envió un centro atrás. Palermo recibió, giró, se tomó su tiempo y antes la mirada de Yepes y Trotta, definió suave, esquinado, al palo derecho de Bonano.

Acto seguido a conseguir la hazaña y en medio del delirio de su gente por eliminar al archirrival de la copa, salió corriendo a abrazar a la persona que tanto había confiado en el . Carlos Bianchi. Miró el cielo y se largó a llorar como un nene.

La película de Martín continuaba..

Tiempo después, Boca ganaría la Copa Libertadores y en Diciembre viajaba a Japón para jugar la final de la Intercontinental con el poderoso Real Madrid.

En cinco minutos, demostró toda su capacidad goleadora y marcó los dos goles con los que Boca ganó la copa por 2-1. Era el momento culmine de su carrera y el principio de la despedida del club de la Rivera.

A comienzos de 2001, se fue al Villareal de España y ahí dejó su huella. No tanto por los goles, sino por su tercer gran accidente. En un partido entre el Villareal y el Racing de Santander, metió un gol y se fue a abrazar con los hinchas, pero nunca imaginó que se le iba a caer en su rodilla el cartel que sostenía la grada.

Llegó el tiempo de una nueva recuperación y hasta un impasse en su carrera. Paseó por el Betis y el Malaga donde jugó muy poco y decidió volver a Boca en 2004. No se equivocó.

Fue campeón de dos torneos locales, dos sudamericanas, y dos recopas, para coronarlo con la Libertadores del 2007.

En el mes de su cumpleaños numero 34, Martín Palermo sigue siendo criticado pese a sus logros. Que es torpe, tosco, que con la pelota no sabe nada y que ya esta viejo.. no sirve mas. A veces uno no le encuentra explicación a tanta critica y hasta pienso, con toda humildad, que el que lo critica es un ignorante y no sabe nada de Futbol.

169 goles, a solo 12 de superar a Francisco Varallo como máximo goleador de la historia de Boca lo dicen todo. Uno puede hacer 1,2,5 goles de casualidad, pero 169 no amigos.

Fue, es y será un ejemplo de deportista. Mas allá de su poca elasticidad, siempre se entregó por completo por la camiseta que le tocó defender.

El hincha de Estudiantes que tiene memoria, lo adora. El de Boca lo ama y lo idolatra, y el resto, que tanto lo critica y lo prejuzga, se muere por tenerlo en su equipo, por lo menos durante 90 minutos para poder gritarle el “Palermo.. Palermo!”


Martín Gallo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

negro cuando martin hace el gol a river el partido estaba 2 a cero el primero del chelo y el 2ª de roman...
salu