viernes, 22 de febrero de 2008

Di Zeo.


Yerba mala nunca muere.

Su vida es digna de ser filmada por las cámaras de Francis Ford Coppola. Tranquilamente podría ser el actor de “El Padrino”, reemplazando a Marlon Brando, pero no lo es.

Es el auténtico cacique del barrio de La Boca, el que corta el bacalao, quien verdaderamente mueve los hilos, foco de muchas críticas pero igualmente un líder de masas que firma autógrafos allá donde va y recibe piropos del mismísimo Diego Armando Maradona. Cuenta con poco más de cuarenta años, descendiente de padre italiano y madre española. Su acento en cambio, es bien argentino y a día de hoy es el ex líder de la barra de Boca, la Doce, y uno de los hombres con más peso en el mundo Xeneize.

Di Zeo es ese tipo de hombres que se sube al tren en el momento justo. Así lo hizo cuando se ganó la confianza del mítico líder de la Doce, José Barrita, El Abuelo, y así lo hizo otra vez cuando éste fue a la cárcel y le hizo la cama junto a su hermano Fernando para tomar el mando de la barra de Boca. Desde finales de los noventa es el Rafa el que domina el asunto y en todo ese tiempo su figura se ha convertido en auténtico mito que sobrepasa todas las esferas sociales. Así de simple y de fuerte.

Di Zeo, que tiene una condena recurrida a falta de sentencia definitiva por un duro enfrentamiento con la barra de Chacarita en 1999, es el amo y señor del universo Boca. Su poder no tiene límites, hasta el punto de que en la dirección no se toma una decisión sin contar con su permiso. Reventa de entradas, coacción a jugadores y directivos, venta de todo tipo de productos en los aledaños del estadio, control de los dispositivos de acceso y seguridad (es cierto por absurdo que parezca) y un largo etcétera le avalan.

Hoy Rafa no esta físicamente, pero la logística la maneja desde Marcos Paz donde se encuentra preso desde 2007.

Esta es la breve historia de Di Zeo y sus chicos, que cobran un buen pellizco por cada pancarta que sacan en La Bombonera. Un día le dan apoyo a un político, otro a un empresario. Es la ley del mercado, una forma más de ingresos cómo cuando tienen que reventar unos piquetes por órdenes de arriba, previo pago claro está. Aquí todo vale. Que las peñas interiores quieren organizar un acto y contar con un futbolista. No hay problema, el Rafa se lo lleva a cambio de una módica cantidad. Y allí, en la peña, a cientos de kilómetros de la capital no es el jugador el que firma más autógrafos, sino el propio Di Zeo, porque Boca es el equipo de la gente y él es el rey de la gente de Boca. Por cierto, si por casualidad al jugador se le pasa por la cabeza no ir a la cita… No, nunca se le pasa.

El caso de Di Zeo rompe todos los moldes a los que se adapta la imaginación. Está más que probada la estrecha relación que mantiene Di Zeo con la Policía Federal, por ejemplo. De hecho, hay fotografías que circulan por la red en las que se ve al líder de la Doce saludando amigablemente a los agentes, esos que tienen que velar por la seguridad pública.

En 2003, su ex novia fue detenida en un operativo en el cual el Rafa escapó. Ella, era

una suboficial de la Policía Federal. Viviana Parrado, según la identificó la agencia Télam, fue indagada por el juez Mariano Bergés bajo el cargo de encubrimiento agravado y el magistrado ordenó la liberación de la mujer, que en ese entonces prestaba servicios de visión de suboficiales y agentes.

Algunos de los que los conocen, dicen que es fanático del hombre araña. Ese dia, Rafa huyó con métodos de película: hizo nudos y descendió del décimo piso del edificio donde vivía, en Ramón Falcón al 2300, al noveno; luego escapó por los techos y llegó a la calle.


La corrupción no sólo se queda en la policía y en su ex mujer, sino que también salpica a los políticos. En una ocasión, durante una entrevista, al Rafa le preguntaron qué era el poder. Y respondió lo siguiente: “Tener poder es tener los teléfonos de quienes lo detentan en serio”. Imaginen su agenda. Porque su poder es infinito por aquella parte del Cono Sur.

Di Zeo simboliza a la perfección el claro ejemplo de que las barras no están solas. De que los clubes las apoyan y de que parte de la policía y el espectro político le guiña el ojo. Es así. En caso contrario, no se entendería que cuando fueron a buscar al ya mítico cabecilla de la Doce a su casa para apresarlo por el delito del que ya ha sido condenado

Podría ser veraz esa historia, más propia de las películas de Hollywood que de la realidad argentina, si su vivienda estuviera en un segundo o tercer piso, pero quién puede creer eso cuando la casa del barra estaba en la décimo primera planta.

Este es Rafa Di Zeo, que además de violento resulta ser un tipo inteligente, que sabe mucho del negocio del fútbol. Un auténtico empresario de la extorsión que organiza por ejemplo ‘barra tours’, que ofrecen al turista la posibilidad de pasar una tarde con la barra e ingresar a la Bombonera por el módico precio de 150 euros. El adiestramiento a otras barras es otro de los últimos campos de explotación de la Doce. “Boca es como Harvard en el mundo de las barras”, dijo un buen día al respecto. Lo dicho, de película.

Como si todo esto fuera poco, hace un par de años, apareció la mujer que hoy se transformó en esposa del Rafa y que hoy es noticia en todos los medios

Soledad Spinetto, la esposa del Rafa que está preso en Marcos Paz, desembarcaría en el ministerio de Seguridad bonaerense para desempeñarse como secretaria del nuevo titular de esa cartera, Carlos Stornelli.

Resulta sumamente sorpresiva esta incorporación al gabinete bonaerense, sobre todo porque Stornelli alardeó en varias ocasiones con los que representará su gestión con respecto a los previos “años de desaciertos”.

Spinetto, que en estos días estuvo recorriendo las instalaciones del ministerio, trabajó durante mucho tiempo como colaboradora de Felipe Solá, hasta que trascendió la relación que tenía con “el Rafa”.

Soledad Spinetto ingresó a la Gobernación de la provincia de Buenos Aires y tuvo un desempeño profesional brillante. En pocos años, llegó a ser la secretaria privada del gobernador Solá. Todo venía bien hasta que se enamoró de Rafael Di Zeo.

Ella repetía “muero de amor por él” e intentaba que sus contactos ayudaran al ‘Romeo’ que ya empezaba a tener los primeros traspiés ante la Justicia.

Sus ex compañeros todavía recuerdan la discusión a los gritos que en septiembre del 2005 tuvieron Soledad y su jefe. Allí se quebró la relación con Solá, y salió eyectada de la Gobernación a la Secretaría de Asuntos Agrarios bonaerense. El cambio pareció no afectarla.

A los tres meses, se casó con Rafael Di Zeo, ya líder indiscutido de la minoría violenta, en una quinta de Benavídez. Vivieron una luna de miel en continuado –que incluyó el último mes en la clandestinidad- hasta que él se entregó a la Justicia y quedó detenido a fines de marzo del año pasado.

Rafa se entregó a la policía en marzo de 2007 y desde ese entonces, Mauro Martín, se hizo cargo de la barra. Los hinchas se quejan que desde que esta Mauro como cabecilla en la 12, hay un grupo delictivo que se aprovecha de la ausencia del gran jefe para robar a los hinchas que van a la segunda bandeja de tribuna que da a casa amarilla.

Pero luego de la victoria por 4-0 ante Argentinos Juniors, empezó a correr el rumor. Rafa podría quedar libre la semana que viene y estaría en el debut de local de Boca en la Copa.

El líder quiere volver y la vamos avisando a Francis, que ya tiene al actor principal para “El Padrino”, pero no la versión numero 4, sino para “El Padrino, Yerba Mala, nunca muere”




1 comentario:

Walter Fonseca dijo...

Excelente post. Completisimo y bien tratado el tema.

Saludos.