Crazy.

Marcelo Bielsa, “Que la historia te juzgue”

Pasaron ya cuatro años. Pero fue una eternidad. Te escondiste vaya a saber donde y te busque por todos lados. Tenía que pedirte perdón en nombre de todos. El pueblo te había juzgado por un hecho puntual. Muy importante, es cierto, pero que de ninguna manera podía tapar todo lo que nos dejaste. Yo me sentí mal en ese momento, porque siempre te banque, en las buenas y en las malas.

Mientras todo el mundo te criticaba; periodistas, esos que hablan mucho y entienden poco; el público, ese que te juzga sin ni siquiera conocer de fondo el tema, yo te entendí y me di cuenta de que no tenias que demostrarle nada a nadie, aunque debo reconocerte que me dolió y hasta el día de hoy no pude superar tu salida de la selección.

Parece una carta de amor que uno le escribe a su primera novia luego de una separación, y no esta muy lejos de serlo. Le tomé cariño a tu laburo y empecé a entenderte y cuando te entendí, todo se me hizo más fácil. Me di cuenta, con la claridad de tu lenguaje que para ganar en el fútbol hay que arriesgar y es mas probable que de esa manera uno consiga la gloria, aunque otros lo hayan logrado de otro manera.

Moriste con la tuya, te aguantaste todo los palos como un caballero, respondiendo con elegancia toda crítica injustificada. ¿Hay explicación para que un gol de tiro libre y uno de penal te dejen afuera de una copa del mundo?. Yo creo que los dos aun la estamos buscando.

Probablemente te refugiaste viendo el tiro libre de Svenson que marcó el gol con el que Suecia nos echó de 2002. Le buscaste la vuelta y no le encontraste explicación. Pero el fútbol es tan lindo que siempre te da revancha loco.

Tu selección fue la que mejor fútbol desplegó durante los últimos 15 años, un equipo que iba al frente en todas las canchas sin importar si era Brasil en el Maracana o Venezuela en el Monumental.

Probaste mil variantes, diste explicaciones de los convocados y del trabajo que hacías en la semana porque nadie te entendía, porque no saben nada.

El fracaso de 2002 te puedo asegurar que me dolió mas a mi que a vos. Y yo se lo que te dolió. Porque pienso como vos.

Argentina clasificó al Mundial con cuatro fechas de anticipación, ¿pero nadie se acuerda de eso viste?. Argentina le ganó a Nigeria y no mereció perder contra Inglaterra ni empatar contra Suecia. Pero el fútbol es así y la derrota duele y seguirá doliendo.

El resultado final lo único que hizo fue hacer hablar a esos giles que esperaban que vos te cayeras. Pero como un gigante que sos te quedaste de pie, agachaste al cabeza, asumiste errores como todos y miraste para adelante como hacen los ganadores, los que piden la revancha a gritos.

Y los giles hablaban. Esos giles que cuando ganaste la medalla dorada en Atenas, ganando todos los partidos y sin recibir goles en contra te decían: Eh! Pero no jugamos contra nadie!. Ilusos. Si tan fácil era, ¿Por qué Argentina no había ganado esa medalla antes?

Después vino la Copa América de Perú. Argentina jugó una gran copa, pero un minuto fatídico nos dejó sin nada. Vos no lo podes marcar a Adriano y eso esta clarísimo. Esa dosis de suerte que se necesita para ser campeón te paso muy lejos.

Siguieron los palos, las agresiones, porque ya parecía una guerra en tu contra. Ganaste en Lima por eliminatorias y dejaste a Argentina sola en la cima con 7 puntos de ventaja.

El triunfo se festejó en los vestuarios de manera única. Impensaba. Nadie entendía porque. Era una victoria más en la cómoda carrera hacia el mundial de 2006.

Pero vos ya habías tomado una decisión y no te ibas a bancar absolutamente mas nada. Los jugadores te lloraron en el vestuario pidiéndote que no te vayas. Nunca en la historia se vio un vestuario así.

Pero te fuiste y con eso se fue mi esperanza de ver a una selección Argentina protagonista en todos lados.

Tres veces te dieron premios como el mejor entrenador nacional del mundo. Primer puesto en 2001, segundo en el 2004 y tercero en 2008.

Si, porque Marcelo Bielsa, rosarino de 53 años recién cumplidos volvió a dirigir a fines de 2007 y no lo puedo creer.

Hasta Chile se dio cuenta de cómo trabajas y en solo 3 meses ya les cambiaste la mentalidad y hoy por hoy llevas a esa selección al mundial de Sudáfrica. Y yo me tuve que comer a Pekerman, un técnico defensivo como pocos. Y me tengo que comer a Basile, un tipo que pone a lo que le piden. No quiero entrenadores, quiero seleccionadores, formadores, tipos que expliquen las cosas difíciles del fútbol, porque el fútbol es muy fácil. Y vos sos el que explica lo complicado para que el jugador que entiende el mensaje simplemente lo desarrolle en la cancha. Y tus jugadores lo entienden al pie de la letra. De hecho, todos te mencionan como el mejor entrenador que alguna vez tuvieron en su carrera.

Te veo en al tapa del diario de Chile y como te bancan allá y me molesta mas, no por vos, ojala te vaya de diez, sino por los incompetentes que nunca te supieron entender.

Este texto me sale del alma, no puedo ser objetivo ni ir en contra de mis principios. Tengo adoración hacia tu trabajo, hacia tu manera de ser. Es como si fueras mi amor futbolístico pase lo que pase.

No necesitaste salir campeón con Newells 2 veces, ser subcampeón de América con ese equipo, dar la vuelta olímpica con Vélez para poder llegar a la selección.

Simplemente te basaste en el laburo y en un discurso que da placer escuchar.

Hoy pasaron mas de 4 años. Un día como hoy, Marcelo Bielsa nacía en Rosario y con el paso del tiempo supo dejar una corta carrera para dedicarse a lo que mas ama, analizar el fútbol.

Te seguirán juzgando los ignorantes, te seguiré admirando desde mi lugar, simplemente espero, que la historia, sea quien te juzgue.


por Martín S. Gallo.